La artroscopia es un procedimiento poco invasivo gracias al cual se puede tratar la mayor parte de la patología traumática y degenerativa de todas las articulaciones.
Dr. Ayala Mejías
Ortopedia y Traumatología
Avances en patología de hombro
1. Lesiones del manguito de los rotadores
El manguito de los rotadores es una unidad funcional del hombro formado por diversos músculos (supraespinoso, infraespinoso, redondo menor y subescapular). Es fundamental para mantener centrada la articulación cuando elevamos el brazo.
Si se rompe (foto de la derecha), esta función se pierde y en individuos activos es conveniente repararlo.
En las lesiones de 2 ó 3 cm, poco retraídas se puede suturar por medio de artroscopia y mini-implantes. En la reconstrucción artroscópica utilizamos anclajes transóseos para reinsertar el tendón y anudamos con nudos especiales deslizantes. En las radiografías (al lado) se muestran los implantes que sirven para el anclaje de las suturas.
En ocasiones, hay que asociar otros gestos como la acromioplastia (aumento del espacio por donde discurren los tendones) o la resección parcial de la clavícula (cuando está afectada), todo ello por cirugía artroscópica.
Otra patología frecuente es la calcificación del supraespinoso cuya formación suele ser de origen desconocido y no suele asociarse a rotura del tendón.
Cuando a pesar de las infiltraciones y el tratamiento rehabilitador, la calcificación no se disuelve, puede ser necesario extirparla artroscópicamente como vemos en las siguientes imágenes.
2. Inestabilidad de hombro
Engloba dos cuadros clínicos diferentes, la luxación recidivante de hombro y la laxitud de hombro. La primera representa el típico caso de episodios repetidos de luxaciones de hombro (más de dos). Suele ocurrir en gente joven y deportistas, por lo que su reparación no debe diferirse cuando ha ocurrido la segunda luxación debido a que, a medida que se producen, se van desarrollando lesiones más graves. Según cada caso, puede repararse mediante artroscopia o por cirugía abierta, dando ambas muy buen resultado (5-8% de reluxaciones), si bien nosotros realizamos un 95% de procedimientos por medio de artroscopia. La técnica artroscópica (foto esquema artroscopia de hombro) consiste en el anclaje y sutura con nudos deslizantes del rodete al borde anterior de la glenoides (es lo que denominamos lesión de Bankart). Se muestra una imagen de las suturas por medio de visión artroscópica.
En cuanto a la laxitud de hombro, suele producirse en mujeres jóvenes e hiperlaxas (muy flexibles), que sufren fenómenos de subluxaciones (les suena el hombro y les produce dolor). En estos casos primero intentamos tratamiento rehabilitador para fortalecer la musculatura periescapular y, en caso de no mejoría, planteamos la cirugía (artroscópica casi siempre).
3. Artrosis glenohumeral y fracturas
En casos de secuelas de fracturas, enfermedades reumáticas (artritis reumatoide, etc), metabólicas, etc., el cartílago articular se destruye y puede ser necesaria la actitud quirúrgica. En casos más favorables, se puede realizar una artroscopia de limpieza y desbridamiento para alargar la «vida» de la articulación. Cuando la destrucción es más severa sólo cabe la colocación de una prótesis de hombro, cuyo diseño actualmente es muy preciso tanto para fracturas como para enfermedades reumáticas.
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Fecha de la última actualización: 26-12-2024